Dirás que este título es retórico, pero si lo vemos desde otro punto de vista, hace sentido y a continuación te lo explicaré. Estamos tan acostumbrados a pensar que tener grandes compañías, carros lujosos, vestir la mejor ropa de marca o tener una lista de contactos más extensas de la industria es una meta alcanzada y esto, no siempre es así.
Los tiempos han cambiado y los formatos ya no son los mismos. Nos hemos dedicado a cumplir con todas las normas de la sociedad para ser aceptados, que nos olvidamos de la más importante, aceptarnos a nosotros mismos.
¿A qué me refiero con ser informal es formal?
No estamos obligados a seguir los tiempos y formatos, de los cuales no tenemos la habilidad en estos momentos de cumplir, ya sean por situaciones económicas, físicas, emocionales, entre otras.
Podemos ver el ejemplo de grandes dueños de empresas como Bill Gates y Elon Musk. Sus vestimentas siempre han dejado de que hablar. Ellos no siempre están utilizando la última pieza de colección, sino que buscan una vestimenta duradera y que se puedan sentir cómodos en ella. Eso sí, no me malinterpreten, no es que se presenten a una reunión en camisillas y chancletas, sino que entiendan que no se necesita lo más caro, la última pieza de colección o el vocabulario más elaborado para poder ser formal.
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